La Navidad ya está a la vuelta de la esquina. Esto, dicho así, parece sólo un tópico más de los de toda la vida, pero este año se vuelve inquietante, como de película de terror, por culpa del fallido (por decirlo suavemente) anuncio de la lotería, que ha cambiado al señor calvo que ya era como de casa por unas figuras alquiladas al museo de cera de cinco estrellazas de la canción de nuestro país. Vamos, que si lo que está a la vuelta de la esquina es Raphael con el soniquete a lo Freddy Krueger y la cara a lo Jack Nicholson en El resplandor, es como para salir corriendo. El anuncio, eso sí, ha tenido sus análisis, sus miles de parodias y su estrellato en redes sociales. Para no ser menos, nosotros lanzamos nuestra propia teoría: Creemos que tiene una clave en plan conspirativo. Fijaos bien: Un cántabro, una madrileña, dos andaluces y en el centro una catalana, destrozando juntos, en público y con cruel ensañamiento una canción del rey del rock (You are always on my mind, popularizada por Elvis). ¿Nos están diciendo que la única solución para la unidad de España es que se derroque a la monarquía? ¿Que la capital de la República resultante debería estar en Barcelona? ¿Que no pegamos ni con cola pero estamos condenados a permanecer juntos? Puede ser. También puede que nos hayan colado un homenaje a aquellos que odian la Navidad o que todo sea un castigo kármico a un creativo que se burló este verano de la paella de Love of Lesbian. Ahí os dejo, amigos, elementos para el debate.
Bueno, el caso es que, embrollos mentales frikis aparte, mientras llega la Navidad con sus empachos, sus horteradas y también, no lo vamos a negar, con sus cosas buenas, nosotros seguimos con los asaltos de cada último domingo del mes, aquel divertido reto que creó la sin par Conxy, del blog Gastroandalusí. Esta vez, para celebrar que es el sexto asalto (medio año ya!), nos hemos puesto espléndidos y hemos asaltado no una, sino dos recetas, y aquí os traemos dos cremitas de verdura que nos encajan a la perfección en nuestra recién creada etiqueta de los lunes verdes. Porque son sanas y ricas, entran fenomenal bien calentitas con estos fríos y su colorido le quita el monday blues al más tristón de la oficina. Este mes tocaba expoliar al fantástico blog rossgastronómica y aquí tenéis las versiones originales de su crema de zanahorias y su crema de guisantes. Nosotros las hemos adaptado a la preparación sin maquinita (bueno, hemos usado una batidora de vaso) y les hemos dado un toque de curry y de tomillo, además de algún que otro cambio de ingredientes. Me gusta que son dos métodos que os pueden servir para cualquier verdura, la crema en crudo y la crema con sofrito previo. Elegid la que queráis o combinad ambas, que quedan muy bien juntas.
Venga, basta de rollos, que hemos venido a cocinar: